Las pruebas prácticas son las que más preocupan a los opositores sin experiencia docente pero queremos tranquilizarlos indicándoles que, aunque la experiencia puede ayudar, lo que realmente se necesita para resolver un problema práctico es conocer cómo funciona un instituto, fundamentalmente sus estructuras organizativas y de participación, conocer la normativa legal vigente, dominar el temario de la especialidad y, ante todo, emplear en su resolución una buena dosis de creatividad y de sentido común. En convocatorias de anos anteriores en diferentes comunidades, el ejercicio práctico ha consistido en responder a varias cuestiones relativas a los tipos de intervención que debe realizar un orientador de un Departamento de Orientación en un centro o en un Equipo de Orientación Educativa en relación a alguno de los ámbitos siguientes: apoyo a los procesos de ensenanza y aprendizaje, apoyo a la orientación académica y profesional y apoyo a la acción tutorial. Nuestra intención con esta obra es ofrecer las suficientes pautas de acción para que pueda resolver con soltura las situaciones que se le plantean en cada supuesto. Los hemos desarrollado con distinta extensión para que pueda adaptarlos a las diferentes opciones que plantean las convocatorias. Algunos casos son extensos porque abordan problemáticas complejas de forma global (pudiéndose interpretar cada uno de sus apartados como respuesta a supuestos prácticos diferentes) y otros supuestos dan respuesta a preguntas muy concretas.