En sus reducidas dimensiones, Inglaterra alberga una innegable riqueza histórica, sazonada con la excepcional vitalidad que aportan sus más de 50 millones de habitantes. Londres, bulliciosa y cosmopolita, se revela como una de las capitales más fascinantes del planeta. El vigoroso presente se refleja igualmente en Leeds, Sheffield o Manchester, ciudades que poseen un panorama musical destacado, con clubes abarrotados cada fin de semana. La Inglaterra pretérita acerca al viajero a los druidas y a su extraordinaria habilidad para mover piedras en Stonehenge, a la pericia de los romanos en Bath o al septentrional muro de Adriano; mientras que la vida religiosa ha dejado su impronta monumental por doquier: desde iglesias rurales construidas en un estilo gótico de elegante sencillez hasta imponentes catedrales como las de Durham y Winchester. Presente y pasado se conjugan en esta completa guía, que permitirá descubrir los rincones más perdidos del territorio inglés.