David Kelsey está totalmente convencido de que la vida va a desarrollarse tal y como él la ha planeado. A pesar de que su único y verdadero amor, la brillante y hermosa Annabelle, se ha casado con otro hombre, eso no puede ser el final de su relación, ¿no? Todavía pueden ser amigos, claro está. Y aún cuando ella está embarazada del bebé de Gerald, eso, con toda probabilidad, no significa que ella, un día, vuelva a los brazos de David, ¿no? David está seguro de que ella volverá con él muy pronto y, bajo un seudónimo, está creando un fabuloso hogar para los dos en una ciudad cercana. Y todo está a punto de caramelo hasta que las cosas toman un cariz criminal, haciendo de David un hombre huido de la justicia.