La Biblia es un libro difícil y complejo tanto para los adultos como, por supuesto, para los niños. Por eso nos parece esencial que los niños, desde pequeños, puedan tener acceso a este tesoro transmitido por los creyentes de generación en generación.Hemos conservado las grandes páginas de la Biblia a partir de palabras clave fácilmente asimilables por los niños, con el apoyo de las ilustraciones. Los dibuixos no pretenden reflejar, siempre y con precisión, los datos de la arqueología y de la historia. Son, ya de entrada, una lectura de los propios textos, en orden a poner de relieve su mensaje y su riqueza simbólica. Hemos dado una mayor importancia a los textos narrativos. Por esta vía hemos querido manifestar una de las originalidades más profundas de la Escritura, es decir, mostrar la obra de Dios a favor de los hombres, des de la creación del mundo hasta la venida de Jesucristo. Es evidente el papel de los padres y madres para ayudar al niño a leer este libro. Al final de cada capítulo encontrarán elementos que les permitirán integrar cada página en un relato o narración.Daniel Palau es vicario de la Parroquia de San Antonio Abad de Vilanova i la Geltrú, consiliario del centro La Capsa del Moviment de Centres d'Esplai Cristians y profesor en la Facultad de Teología de Cataluña.Ignasi Blanch nació en Roquetes. Tras estudiar Bellas Artes en la Universidad de Barcelona, vivió tres años en Berlín, donde participó, como único representante español en el proyecto artístico East Side Gallery, sobre un fragmento del muro que se conservó. También en Berlín estudió técnicas de grabado y estampación y decidió su futuro como ilustrador de libros. Ahora trabaja para varias editoriales y da clases de ilustración en la Escuela de la Mujer-Centro F. Bonnemaison de la Diputación de Barcelona. Ha ilustrado numerosos libros infantiles, entre los más recientes "La Blancaneu" (2004), "En Luka i el dinosaure" (2005), "Vull una corona" (2005), "Alícia en el País de Meravelles" (2007) y "El nen koala" (2007).