En estas reveladoras memorias políticas, Hernández Mancha, expresidente de Alianza Popular, ofrece una mirada íntima a los bastidores de la política española desde 1976 hasta 1990. Desde sus primeros días como abogado del Estado hasta su ascenso a la presidencia del partido, desentraña los entresijos del poder y desvela las estrategias y decisiones que moldearon el panorama político de la época imprimiéndole un cambio profundo e irreversible, que sus sucesores aplicaron en la práctica. A través de diálogos con personalidades importantes de la época e intercalando anécdotas que alivian la profundidad del relato, destaca su papel en la Refundación Popular, subrayando su trascendencia en el devenir de la derecha española. Para Hernández Mancha, el Partido Popular no puede ser el ave de mal agüero que solo entona su lúgubre canto en los atardeceres sombríos de las exequias de España. Hernández Mancha nos hace partícipe de sus ideas orteguianas sobre la necesidad de intercalar, entre el Estado y los municipios, la comunidad autónoma como institución regional. Su ruptura con figuras internacionales de la talla de Margaret Thatcher, desafiando el statu quo, nos conduce a sus debates con líderes como Felipe González y Adolfo Suárez y las disputas dentro de su propio partido para convencer a todos de la necesidad del cambio, de una derecha de adusta elegancia aparencial a otra moderna y sin anclajes reaccionarios. Conservador revolucionario y visionario audaz, observó un profundo silencio al desaparecer de la escena política, que rompe ahora, después de más de tres décadas, con el libro que tiene en su mano.Antonio Hernández Mancha (Guareña, Badajoz, 1951) es abogado del Estado y reconocido político por su destacada trayectoria en España. Compaginó la abogacía del Estado y la docencia universitaria, como profesor de Derecho Civil, con la política hasta 1982, cuando es elegido diputado al Parlamento andaluz. Pide la excedencia y se centra exclusivamente en los asuntos públicos. Durante su tiempo en el Parlamento de Andalucía, destacó como portavoz del partido, asumiendo el cargo de presidente regional de Alianza Popular en Andalucía. En 1987, tras una serie de acontecimientos políticos, emergió como líder nacional de Alianza Popular. Aunque enfrentó desafíos, incluida una moción de censura fallida contra el Gobierno socialista, su liderazgo marcó un periodo crucial en la historia del partido. Tras su retirada de la política activa volvió a su carrera legal. Actualmente, continúa ejerciendo como abogado en Madrid. Está casado y tiene dos hijos.