En las últimas décadas, los especialistas y estudiosos del pensamiento de René Descartes han incidido en la importancia que la ciencia moderna desempeña dentro del proyecto cartesiano. Ciertamente, para Cartesio, ciencia y filosofía constituyen un entramado epistemológico indesligable, según se evidencia en el símil del árbol de la filosofía expuesto en la Carta-Prefacio de los "Principios de la filosofía" (1644). En este sentido, es sabido que, a través de obras como el "Tratado de la luz" (1664), la "Geometría" (1638) o el "Tratado del hombre" (1642), Descartes realizó aportaciones significativas a distintas disciplinas científicas como la medicina, la física o la matemática. Con todo, sus contribuciones al campo de la mecánica han pasado más desapercibidas aun cuando el interés cartesiano por esta ciencia se manifiesta de forma temprana en sus "iuvenilia" y perdura hasta sus últimos escritos. Así, a fin de evidenciar las aportaciones que Descartes realizó a esta disciplina, la presente obra recoge los diversos tratados y fragmentos de la correspondencia en los que Descartes abordó cuestiones de mecánica. A este respecto, destaca la importancia del "Tratado de la mecánica", cuya publicación se produjo de forma póstuma en el año 1668, pues constituye el primer opúsculo de Descartes dedicado íntegramente a cuestiones mecánicas, en concreto, al análisis de las máquinas simples. El lector encontrará en la presente obra una compilación de los escritos cartesianos más significativos respecto a la ciencia mecánica, así como un estudio introductorio donde se establecen las coordenadas con las que entender su propuesta mecánica en el contexto del siglo XVII.

René Descartes (1596-1650). Tras completar sus estudios en el colegio jesuita de la Flèche y servir como soldado en la Guerra de los Treinta Años al servicio de M. de Nassau, consagró el resto de su vida al cultivo de la filosofía y de las ciencias. Padre del mecanicismo y de la filosofía racionalista, publica en 1638 el Discurso del método, al que seguirán las Meditaciones metafísicas (1641), el Tratado del hombre (1642) y los Principios de la filosofía (1644). Su temprana muerte en 1650 deja inacabados multitud de proyectos, así como una serie de obras inéditas que serán compiladas y publicadas póstumamente y entre las que se encontrará el Tratado de la mecánica (1668).