Helen Vendler, una de las críticas de poesía más autorizadas, analiza&nbsp,cómo cinco grandes poetas modernos estadounidenses, al escribir sus&nbsp, últimas obras, intentan encontrar un estilo que haga justicia tanto a la&nbsp, vida como a la muerte. Al no disponer ya de los consuelos religiosos&nbsp, tradicionales, estos poetas deben inventar nuevas formas de expresar&nbsp,la crisis ante la muerte y la paradójica coexistencia de un cuerpo en&nbsp, decadencia y una conciencia intacta. En La roca, Wallace Stevens escribe&nbsp, narraciones simultáneas de invierno y primavera, en Ariel, Sylvia Plath&nbsp, presenta el melodrama con una fría formalidad y, en Día a día, Robert&nbsp, Lowell resta plenitud. En Geografía III, Elizabeth Bishop queda atrapada&nbsp,y liberada, mientras que James Merrill, en El rocío de la sal, crea una&nbsp,serie de autorretratos mientras muere, representándose a sí mismo con cosas como un árbol de Navidad.&nbsp,El término de una vida es para el poeta un punto crucial en su escritura:&nbsp,la pregunta de si ha valido la pena, no escribir, sino su propia obra. La&nbsp,última mirada d