Amy Malory decía ser una joven tímida y recatada, pero era capaz de ser tan salvaje como el más incorregible de sus primos. Cuando algo le interesaba podía ser audaz y despiadadamente directa, sobre todo a la hora de defender a su familia.A los dieciocho años, Amy se sintió atraída por el candidato más inapropiado: un capitán americano, el apuesto Warren Anderson, atormentado por la traición de una amante infiel..