Albert Einstein pensaba que únicamente las personas lo suficientemente locas como para pensar que podían cambiar el mundo lo cambiarían realmente. En las últimas décadas hemos avanzado en la comprensión de la locura no como irracionalidad, sino como una forma diversa de pensamiento, fuera de la norma y capaz de alumbrar nuevas interpretaciones y visiones de nuestro entorno. Lamberto Maffei nos adentra aquí en los caminos entrecruzados del arte y el cerebro y nos ofrece las historias de algunos artistas locos que mejoraron la vida con su creatividad y su verdad. El resultado es una imagen novedosa y auténtica de la naturaleza humana que pone en el centro la fragilidad, la búsqueda de la belleza y el miedo a la muerte y al infinito.

«La lente neurológica que Maffei aplica al arte es el bajo continuo que acompaña el análisis de las obras de Degas, Münch, Van Gogh, Klee, Klimt [...], Mozart o Ravel. Pero, desde el principio, la discusión se expande hacia observaciones antropológicas sobre cómo la sociedad "normal" ha expulsado a los locos y, finalmente, se convierte en un pretexto para esbozar otra visión del mundo». La Stampa