Recomendación librera

"Las primeras páginas de la novela me hicieron dudar de si había sido una buena idea: leer el dolor de una madre que ha perdido a su hijo en un trágico accidente me pellizcaba el alma... Pero Aramburu consigue, a partir del crudo relato de un hecho que sacudió la vida de todo el pueblo de Ortuella en el año 1980 con la muerte de cincuenta niños y tres adultos por una explosión accidental de gas en una escuela, ponernos en la piel de la madre, el padre y el abuelo de uno de los niños que perdió allí la vida, empatizar con su dolor y que agradezcamos haber seguido avanzando en su lectura. Es una novela breve, desgarradora e intensa, donde la madre, años después, explica al autor cómo la família intentó sobrevivir a la tragedia, cada uno a su manera: nos hace sentir ternura por el abuelo Nicasio, que incapaz de aceptar la muerte del nieto se imagina una vida paralela donde el Nuco sigue viviendo a su lado; compasión por su marido, que quiere tener otro hijo para llenar ese vacío y sentirla también por ella, un ejemplo de resiliencia ante todas las adversidades que irán sucediendo en su vida después de la muerte del niño, porque nuestra historia no la escribe lo que nos pasa sino lo que hacemos con aquello que nos ha pasado."

Montse

Caselles Llibreria Lleida