En estas páginas se esconden 49 regalos, envueltos en papel de seda y lazo de raso. Podrás abrirlos en el orden que prefieras, al ritmo que necesites. Incluso podrás hacerlo repetidas veces. Ninguna será igual a la anterior.

Cada relato, perdón, cada regalo encierra varios mensajes. No creas que serás capaz de descubrirlos todos en una primera lectura. No te inquietes. La buena noticia es que el autor en su generosidad (o en su clemencia) te ofrece una guía al final del libro en forma de Índice onomástico. Visitarás esa sección con avidez. A veces, comprenderás más. A veces, comprenderás mejor. Y a veces, dará igual lo que comprendas porque querrás seguir buscando fuera de este libro.

Encontrarás historias de amor, de búsqueda, de nostalgia, de reflexión... Pasearás por el dolor, por la alegría, por la duda, por el desconcierto... Cerrarás el libro en más de una ocasión para pensar sobre lo leído. Tómate tu tiempo y date varias oportunidades.