Un relato maravilloso del Hollywood más disfuncional. Dudo que puedan leerse unas memorias mejores este año.' The Guardian 'Una historia penetrante, pulida y brillante. Adiós, Tenenbaums, dejen paso a los fabulosos Frank.' The New York Times 'Con una prosa reflexiva y fluida, Frank evoca la magia y la sofisticación de una desaparecida élite intelectual de Hollywood que conocía bien el lenguaje cinematográfico.' Publishers Weekly 'Una obra que debería ser ampliamente leída debido a sus reflexiones sobre las familias y sobre el proceso de madurar.' Library Journal 'Frank aporta una sagacidad proustiana y una prosa afilada a unos dramas familiares de un carácter tan esencial, excéntrico y peculiar como cabría esperar.' The Atlantic 'Estamos ante una de esas autobiografías que inspiran tanto fascinación como una sensación de incomodidad. ¿Está el lector presenciando algo demasiado personal? ¿Debería apartar la mirada? Es posible, pero no puede hacerlo porque querrá saber qué sobrecogedores secretos van a revelarse a continuación. Booklist.

La autobiografía novelada del descendiente de una excéntrica familia de guionistas de Hollywood 'Un relato maravilloso del Hollywood más disfuncional. Dudo que puedan leerse unas memorias mejores este año.' The Guardian 'Lo que siento por Mike es algo fuera de lo normal', oye casualmente Michael Frank que su tía le dice a su madre cuando él es un niño de ocho años. 'Es algo más fuerte que yo. No lo puedo explicar. Lo quiero más que a la vida'. Con estas palabras oídas sin querer entramos en el fascinante mundo de los Frank. Los tíos de Michael, Hankie Frank Jr e Irving Ravetch, son unos glamorosos guionistas de Hollywood sin hijos y están doblemente emparentados: Hankie es hermana del padre de Michael, e Irving, el hermano de su madre. Las dos familias viven a poca distancia la una de la otra en el barrio de Laurel Canyon, situado en Los Ángeles. La tía Hankie, con su excéntrica personalidad, logra que todos los miembros de la familia se sometan a sus designios. Mujer de talento, temperamental y generosa en sus afectos, aleja a Michael de sus padres y de sus hermanos menores y pasa a ocuparse de su educación: le indica lo que debe leer (Proust sí, Zola no), qué pintores debe admirar (Matisse sí, Pollock no) y hasta qué estilos arquitectónicos debe preferir. La tía educa la mente y la mirada de Michael hasta que esa mirada empieza a ver por sí misma. Los fabulosos Frank" conectará con cualquier lector que haya luchado para encontrar una voz independiente en medio de las turbulencias de la vida familiar.