Detalles del libro

Resumen

Monólogo del entreacto es un recorrido por la obra poética de Manuel Rico a través de cien poemas, seleccionados por el propio autor, de siete de sus ocho libros publicados. La poesía de Rico descansa en una equilibrada combinación de memoria, melancolía, apelación a la historia e indagación en el lenguaje desde una concepción del poema como espacio donde amalgamar "palabra reveladora y conciencia crítica", tal y como él mismo afirma en el prólogo. La antología va precedida de un estudio preliminar de Marta Sanz, que analiza, mediante un recorrido por los poemas antologados, las claves de su poesía.

Críticas

Monólogo del entreacto, con selección del autor e interesante estudio preliminar de Marta Sanz, es la primera antología de Manuel Rico. En ella se recogen cien poemas procedentes de siete de sus ocho libros.; cien poemas en los que se resumen veinticinco años de escritura y que, por tanto, nos facilitan una lectura retrospectiva, que es la que en mi opinión demanda su obra.

La antología se cierra con 'tres fragmentos inéditos'. Los versos finales, dedicados a la muerte de la madre, nos devuelven a los comienzos y completan el sentimiento de orfandad del que hablaba al principio. Entre una muerte y otra, discurre, pues, este intenso 'monólogo del entreacto' con el que se intenta superar la pérdida y la derrota y conjurar la orfandad histórica y personal."

Luis García Jambrina, ABCD las Artes y las Letras, Madrid, 26.1.2008.

Ejemplo

IMAGEN DE SARAJEVO¿Alguna vez sabremos por qué en ciertas mañanashay un olor a pólvora y a sangrejunto al rosal que crece en el jardín?¿Por qué con ese olor cuyo origen ignorasun muro destruido se erige en tu recuerdoy hay un niño sin ojos en medio de la calley postes telegráficoscruzando, como escombros, la calzada?Si tú eras el más sabio de la infancia,el que tenía los ojos en su sitio,no ese niño que huye con espanto y ceguera,sino el feliz, ¿a qué ese olor a pólvoraen la rosa, esa imagen de luz desbaratada,ese paisaje muerto de postes derribadosen calzadas inútiles?