¿Qué impacto personal tuvo para los soviéticos la caída del socialismo, qué reacciones suscitó en la gente de a pie lo que parecía indestructible? ¿De qué manera se reflejó ese desplome en el arte, en el humor y en el día a día de una población que vivía atrapada en el sueño comunista? Yurchak expone las profundas trasformaciones que la Unión Soviética sufrió durante los estertores de la perestroika y, mediante un pormenorizado análisis de chistes, sátiras, espectáculos y costumbres populares propias de ese momento decisivo, da cuenta de la particular manera en que los soviéticos afrontaron los traumáticos cambios: suspendiendo la fe inquebrantable que tenían en la eternidad del socialismo y abriendo horizontes nuevos que aún no comprendían.

El término “hipernormalización” del que Yurchak se sirve para denominar ese fenómeno, constituye uno de los principales hallazgos de este libro singular, minucioso y ameno, y se ha convertido en una herramienta metodológica de primer orden a la hora de explicar la caída de otros sistemas. ¿Acaso el crac económico de 2007 no produjo también una suerte de hipernornalidad? ¿No estaremos nosotros también creyendo que nuestro sistema es para siempre mientras esta dejando de existir?