Un puente en la madrugada cruza el río de la vida a través de sus diferentes etapas y las emociones que el agua arrastra: el amor y el desamor, la nostalgia por la infancia y la vida en familia, el cuidado y la pérdida de los padres. Una mirada desde la edad madura, en la que coexisten la búsqueda de la propia identidad con el miedo a la soledad, la resiliencia y empoderamiento.